La semana pasada Cami nos contó sobre las series que vuelven a nuestras pantallas con la Primavera. ¡Bienvenidas sean! Digo yo, y aprovecho para hacer un poco de reciclaje y cuidar el medio ambiente virtual, así que aquí les traigo un artículo sobre la primera temporada de Infidels, la serie española que nos hará hablar en catalán... Para las que no las conozcan aún, les presento a las "Darlet".
¿De qué somos capaces las tortitas? A la hora de buscar identificarnos con algo de lo que vemos en pantalla, somos capaces de ir hasta los lugares más recónditos y ver las historias más extrañas en busca del arca perdida. ¿Quién diría que muchas de nosotras seríamos capaces de ver una historia triste y dolorosa en la China del siglo pasado (Les Filles du Botaniste)? ¿O que nos interesaría el cambio de la marea en alguna ciudad perdida de Canadá (La Turbulence des Fluides)? ¿O que nos importaría saber qué le depara el destino a una mujer india recién casada (Fire)? Ni siquiera quiero recordar que alguna vez intenté saber cómo es la inseminación artificial en Finlandia… (Producing Adults).
Por eso mismo, ¿quién hubiese dicho que yo alguna vez iba a seguir una serie hablada en catalán? No, jamás lo hubiese imaginado, pero este mundo ultracomunicado da para todo, desde engancharse con un culebrón australiano (Home and Away), hasta intentar descifrar qué cuernos dijeron los pastelitos ingleses de Skins.
Una salvedad: cuando digo “seguir una serie”, en general (salvo en contados casos como Mistressess o Los “no ya tan agradables” Hombres de Paco), esto significa no perderme ninguna de las escenas donde aparezca una de las dos mujeres que forma parte de la pareja sáfica que me llevó, en primer lugar, a ver ese programa de televisión extranjero, pero sin seguir la trama en general (salvo Heroes, que al menos lo veo desde siempre).
En el caso de Infidels, puedo decir que debe ser una buena serie dramática. Trasmitida por TV3 en Cataluña, este programa hace foco sobre un grupo de mujeres, sus vidas y sus relaciones amorosas. Sí, aquí el que no es infiel, es el pobre damnificado que se lleva los cuernos de recuerdo.
A este grupo de amigas de diferentes edades se suma Arlet (o, para estar más a tono, “la Arlet”), la más jovencita de todas, que es maestra de la hija de una de las mujeres con las que comienza a reunirse en un gimnasio para hacer aquagym y también a comer alguna que otra noche.
La chica (Aina Clotet), que recuerda mucho a la joven Carla Peterson de los inicios, tiene un novio, Víctor (Gorka Lasaosa), al que le presta poca atención, aunque hace ocho años que están saliendo (o… por eso mismo le prestará poca atención). A ella todo lo que hace el muchacho le molesta sobremanera, pero aunque se resista, sabe muy bien que en algún momento deberá dar el próximo paso: convivir. La decisión se verá apresurada por una serie de sentimientos que comienzan a bullir en su interior: a Arlet algo le pasa con la Dani (porque sí, es “la” Dani), la profesora de aquagym, interpretada por Dolo Beltrán, la cantante del grupo español Pastora.
De una incipiente amistad, la atracción que siente por esta mujer, algo mayor que ella, se hace evidente. Dani es lo que se puede decir… una perdida. Da clases porque sus sueño de ir a las olimpiadas se vio frustrado por una lesión, ningún hombre le dura, y su nuevo departamento es un completo desastre. Pero aún así, Dani en general le suele poner buena onda al asunto, de hecho, sonríe cuando Arlet la sorprende con un beso en la boca en una visita inesperada a la pileta. Sí, ese beso cambia todo, pero aún cuando la Dani se escape de la situación, terminará sucumbiendo a lo que realmente le sucede.
¿Y con Víctor qué hacemos? Aquí llega la infidelidad de Arlet, porque ella no puede esperar para pisar los terrenos pantanosos del lesbianismo. El capítulo en que estas chicas logran tener relaciones realmente es muy gracioso.
Hay algo de locura y ternura en Arlet, y algo de desorientación y optimismo en la Dani. También mucho desasosiego en Víctor, pobre tipo, a la mejor manera de Tim (Eric Mabius), el novio de Jenny en The L Word, Víctor es un tipo querible.
La historia de Arlet y Dani sobresale con frescura en un mar de lágrimas creado por el resto de las protagonistas de Infidels: la mujer que descubre que su marido lleva una doble vida; la psicóloga viuda; la otra también engañada, que interpreta Ingrid Rubio, conocida en Argentina por haber sido la protagonista de la excelente película El Faro; y la que engaña porque ya no tiene nada que perder, hasta que lo pierde todo.
Lo interesante de Infidels, además de que estoy aprendiendo catalán acelerado, es la manera de abordar el asunto “homosesual” (como diría Pepa). El proceso de Arlet se vive ante cámara, empezando por la atracción, pasando por los celos que siente cuando la ve con un “tío”, amigo de su novio, y la necesidad de su constante cercanía, aunque la Dani no intuya lo que le sucede a la otra fémina.
El beso llega inesperadamente, casi como una necesidad de hacer salir sus sentimientos, como una respuesta psicológica a la infelicidad de su propia madre que, además de mujer maltratada por su marido, se privó de estar realmente con el hombre que amaba. Sí, el beso es como una revancha de todas las mujeres abusadas y se lo planta a la Dani, dejándola muda, y disfrutando de un segundo beso, cuando ésta se prende sin pensarlo demasiado.
Luego Arlet nos hará sentir la desazón, cuando la profe se le escape y la ignore, pero la casualidad (o tal vez el destino), las ayuda a acercarse: el nuevo apartamento de la Dani se ha inundado y la pobre mujer, antes que volver a la casa de sus padres, prefiere dormir en uno de los bancos del vestuario del gimnasio donde trabaja. Obvio, Arlet se la lleva a su casa. ¡Qué caritativa! Y allí será cuando la Dani se dé cuenta de que a ella también le pasa algo, en especial cuando comience a tener celos de verla con Víctor.
El siguiente paso: hacer algo con lo que les está sucediendo. Una cita: check! Ambiente listo: check! Té saborizados (sí, son tortonas y adictas al té, ¿qué más se podía esperar?): check! Seguridad: cri cri...
Artlet no hace más que prolongar el momento, aunque las dos tienen bien en claro que se citaron solo para “eso”, pero surgen las inseguridades de la maestra y la experiencia de la Dani no sirve para nada, porque jamás estuvo con una mujer o… con alguien que le importara lo suficiente, así que están en igualdad de condiciones.
Los bomberos y un supuesto incendio interrumpen su posible encuentro, y lo mismo hace Víctor cuando vuelve a la casa sin avisar y les corta el chorro. ¿Tiene sexo finalmente? ¡Por supuesto! Porque Arlet tuvo un sueño premonitorio (y no será el único que tenga a lo largo de los dieciséis episodios de la serie), en donde se vio refugiándose de la lluvia en el gimnasio con la Dani, así que cuando se largue el Diluvio Universal y pase Noé con el Arca, la joven saldrá corriendo para finalmente hacer el amor con la Dani, por primera vez, sobre uno de los bancos del vestuario. Claro, ¡todas mojadas! Por la lluvia, ¡mal pensadas!
Si bien fue infiel, Arlet no quiere seguir siéndolo, así que va de frente con su novio, que tarda un poco en reaccionar, pero finalmente se quita de en medio, y las chicas formalizan su relación.
Ya no interesa que sean mujeres, de hecho, nunca se hicieron mucho problema al respecto, aunque el padre de Arlet le haya levantado la mano por “bollera”, así que en cuanto pueda, la joven les comenta a sus amigas la buena nueva, como si ellas no se lo hubieran visto venir… bueno, no tanto, porque estas mujeres tienen tantos problemas, que tampoco están como para andar ocupándose de historias ajenas.
Obvio, a ninguna le molesta ni le interesa demasiado, y no tienen problemas al verlas juntas. Claro, territorio español, ¡qué suerte! Ya se pueden casar y todo, y si hablaran castellano hasta podrían morir baleadas en su propia boda. ¡No cualquiera!
Mmm, hablando de boda… la Dani le propone matrimonio en el final de temporada, pero todo le sale mal, es que esta mujer es un desquicio que resulta muy graciosa: pierde el anillo, un poco más logra que Arlet se atragante con la alianza que le mete en el té (obviamente), pero Arlet le dice que no, que no le contestará que sí o que no a su proposición hasta que le pida matrimonio como es debido. ¡Apa! Encima pretensiosa… ¿quieren saber qué sucede con las “Darlet”? Bueno, para eso tendrán que esperar hasta que comience la nueva temporada, a principios de 2010 (la fecha finalmente se postergó y se estrena en septiembre)…
Hasta entonces, conténtense viendo sus videos subtitulados, si aún no lo hicieron, ¡lo recomiendo! Aquí tienen los videos subtitulados en español en el canal de Nothernstar76.
Principios del 2010?
ResponderEliminarBueh, habra que ver cuando empezo el año para @Debora_Dora no? JAJAJA
Prendida como siempre, no me dan los dias de la semana para ver todo, pero aqui estamos aguantando.
Me distrae un toque el gif de Glee, no puedo seguir escribiendo
Jajaja, ya está acomodado, y cuando edité aclaré que era reciclkada la nota, por eso el tema de la fecha!
ResponderEliminarQué gift t distrae? el de Lea?
Jajaja. Valida la correccion entonces.
ResponderEliminarSi, el gift de Lea. Mientras escribia el comentario tuve que releer varias veces mientras tipeaba.
Tristisimo porque no es la primera vez que lo veo, pero bueh... cosas que pasan